Cuentos en el blog

domingo, 30 de enero de 2011

Los invisibles contra los dioses del Olimpo mediático



Con el riesgo de parecer un ermitaño desinformado, hace tiempo que me he desconectado de los periódicos, de los noticieros de la televisión y ni que decir del bla, bla, bla de los programas radiales. No se si será la edad, pero mis oídos y ojos están hartos de la banalidad y chabacanería, principal componente de las “noticias” a las que nos tienen acostumbrados. Sin embargo muy de ves en cuando aparecen algunos “diamantes” que brillan como pequeños faros de esperanza entre el estiércol que los medios publican a los cuatro vientos.
Estos peculiares hechos, de real entrega y servicio por el prójimo, son los protagonizados generalmente por personas anónimas que a pesar de su valía permanecen invisibles y muy pero muy lejos del Olimpo mediático de políticos, modelos, futbolistas, entre otros dioses y diosas.
Es entonces cuando, por casualidad, uno lee que un bombero salvo a alguien atrapado en un incendio, o que un niño salvó a su amigo de ahogarse en el río y se pregunta ¿Por qué estos verdaderos hombres y mujeres vuelven a su “invisibilidad” luego de dos o tres días del acto heroico realizado y una modelo por haber aumentado centímetros su busto y traste o haber reducido su cintura permanece en las portadas por varias semanas? ¿Que diferencia a la los dioses del Olimpo mediático de los hombres invisibles?
La respuesta a esta pregunta me llegó hoy por Facebook de la mano de mi amiga de la primaria Claudia Fernández que colocó en su muro la siguiente frase:
El verdadero valor consiste en hacer, sin testigos, aquello que serías capaz de hacer delante de todo el mundo.”
Los dioses del Olimpo mediático necesitan de la ambrosía de la fama y la gloria para sobrevivir ya que sin ella su mundo y ellos mismos, desaparecerían como una pompa de jabón y es por ello que montan a su alrededor todo el andamiaje necesario para que esto no suceda.
No es malo que un dios desee alimentarse, todos tenemos derecho a hacerlo. Lo malo es que la gente esté dispuesta y ávida de alimentarlos dando más importancia y reconocimiento al glamour de la farándula que a un salvataje de un incendio ya que como dicen algunos “es logico que un bombero apague fuego y salve victimas...para eso esta luego...”
Este ultimo insensible comentario dicho y pensado desgraciadamente por muchos de los alimentadores de los dioses mediáticos, demuestra que se está perdiendo la perspectiva entre lo banal del mundo de luces y marquesinas, y lo esencial del mundo real que es ser “humano”.
Por suerte para el mundo, existen más hombres y mujeres invisibles que dioses mediáticos, y son los primeros quienes día a día, sin la necesidad de luces y micrófonos, al encontrarse en el lugar adecuado en el momento justo, a diferencia de muchos, solamente hacen lo que deben hacer para que no se pierda el verdadero concepto de SER HUMANO.

viernes, 21 de enero de 2011

Imposible

Se dice que “lo que hoy es imposible mañana puede dejar de serlo”. Es con esta premisa que el hombre se a arriesgado a realizar proezas, tildadas por sus contemporáneos como locuras. Sin embargo estos “imposibles” son los que nos han llevado al grado de tecnología que tenemos hoy en día.
Desde el primer ascenso al monte Everest, la conquista de los polos, el primer vuelo realizado por una maquina más pesada que el aire, hasta la clonación , sus arriesgados ideólogos y ejecutantes fueron considerados "locos" en su época.
El hombre desde sus comienzos se ha preocupado por llegar más allá de sus posibilidades forzándose al máximo para lograr lo imposible, sin embargo se ha despreocupado de lo que va dejando detrás suyo en el proceso. “Sacrificio mínimo en pos del progreso” se dirá en el pomposo discurso de presentación cuando algún “desubicado” pregunte sobre las consecuencias que el descubrimiento puede traer.
La frase “Los derechos de uno terminan en donde empiezan los de los demás” podría aplicarse diciendo: “El progreso deja de serlo cuando afecta en alguna forma al vecino”.
En la historia de la humanidad y en especial en los últimos doscientos años, la suma de los sacrificios mínimos nos han llevado paradójicamente a enfrentar varios sacrificios “máximos” entre ellos la contaminación, la polusión sonora y la deshumanización e insensibilidad de las personas que no solamente miran con indiferencia estos problemas si no que contribuyen a que estos se acrecienten, después de todo nadie puede vivir, hoy en día, como un neandertal. 
Muchos creen imposible vivir sin celular, sin automóvil, dejar de arrojar por día a la basura o a la calle varias toneladas de plásticos, que tardarán en degradarse cientos de años; tocar la bocina cuando alguien delante nuestro tardó más de tres segundos en darse cuenta que el semáforo estaba en verde. Creemos que sería inhumano dejar el confort que el consumismo nos brinda, como también es imposible evitar que los hombres sigan peleando por intereses económicos.
Sin embargo, si no tomamos conciencia y cuidamos nuestro entorno arrojando la basura donde se debe y evitando las bolsas plásticas; plantamos árboles o tratamos de evitar que se tale el del vecino, aunque seamos cocientes que millones de hectáreas son desforestadas todos los días; tiramos desperdicios a ríos, arroyos y lagos; lo que hoy es imposible mañana dejará de serlo... porque si seguimos así no sólo dejaremos de tener celulares, automóviles, aviones, computadoras sino que también dejaremos de tener un lugar en el universo en donde vivir y respirar

sábado, 15 de enero de 2011

Se viene "El fotógrafo de Loma Tarumá"

Cuando uno tiene un revés y se te acercan diciendo “no hay mal que por bien no venga” lo primero que uno piensa es meterle, a esa persona, un estropajo en la boca. Sin embargo,de seguro, luego que los ánimos se han calmado encontramos que estas palabras son muy ciertas.
Este es el caso de mi próximo libro el cual nació de una rabieta al haber “rebotado” de un concurso de proyectos en donde concursaba mi novela “El asesinato del Faraón”(casi agotada la primera edición) la cual ademas de ser rechazada por el jurado fue calificada como “intrascendente”. Este hecho sumado ha que el año anterior otro jurado había premiado y elogiado, para el mismo concurso de proyectos, a mi novela “Bajo la mirada de la cobra” hizo que me enfrascara en un proyecto en donde el tema será totalmente distinto al del antiguo Egipto. Esta vez tratará sobre el Paraguay de mediados del siglo XIX.
Lo que al principio creí seria una novela de no más de doscientas paginas comenzó, como siempre, a tomar vida propia y crecer en volumen para transformarse en una trilogía, de la cual el tercer volumen aun no se ha terminado.
Siguiendo el estilo de la novela de aventuras con “chinches” históricas que introducen al joven lector a un mundo solo conocido por los “aburridos” libros de texto escolares, con “El fotógrafo de Loma Tarumá” y las otras dos novelas que completan la saga, revivirán los turbulentos acontecimientos de la historia sudamericana y europea entre los años 1861 a 1888.
Muchos de los nombres de los personajes ficticios de esta nueva historia son los de amigos y conocidos, de quienes espero no conseguir con esto su enojo por mi atrevimiento, por otro lado existen también personajes que si bien sus nombres son inventados tienen la personalidad y características de personas reales. A estos personajes, como es mi costumbre,  los haré interaccionar con personajes históricos, lo que no ha sido nada fácil.
Una cosa es hablar de personas que vivieron hace más de cuatro mil años, de las cuales poco se conoce, y otra muy distinta es hacerlo de personas que murieron hace un poco más de ciento cuarenta años.
El trabajo de investigación y creación de esta novela llevo casi tres años, en los cuales se tuvo que buscar el perfil y característica principales de cada uno de los personajes históricos para que estos tomen vida en la novela, sin alejarse de la realidad ni abrumar al lector.
El escriba egipcio Waty, que tantas satisfacciones, literariamente hablando, me ha dado, dará paso a su “hermano” Gustav Demczszyn, un fotógrafo prusiano que llega a las tierras guaraníes durante el gobierno del primer presidente constitucional paraguayo, Carlos Antonio López. Es en este marco que Gustav deberá adaptarse a un nuevo clima, idioma y costumbres, muy distintas a la de su Posen natal (actual ciudad polaca de Posnan), viviendo las situaciones propias de un inmigrante.
Las aventuras de nuestro fotógrafo no solo se desarrollaran en Paraguay, ya que los caminos de esta historia lo llevarán a conocer varios lugares y caudillos de américa, como ser Domingo Faustino Sarmiento, Justo José de Urquiza, Bartolomé Mitre, Venancio Flores, Francisco Solano López, como también ciudades y personalidades de la historia europea como Napoleón III, Charls Dickens, el fotógrafo francés Nadar, entre los más de cincuenta personajes históricos que toca la novela.
Intrigas, traiciones, romance y por sobre todo muchas aventuras harán que el lector disfrute de un entretenido viaje a finales del siglo XIX por las ciudades paraguayas de Asunción, Luque y Paraguarí; las argentinas de Paraná y Buenos Aires; Las inglesas de Southampton, Londres, Liverpool y Manchester; entre otras como ser : Río de Janeiro; Montevideo; Lisboa; París; Hanhover y Posen.
Se dice que cada libro es como un hijo... y yo puedo agregar que los días anteriores a su "nacimiento" son el dolor de parto. Los “últimos” retoques y detalles que jamas son los últimos, el ir y venir del corrector al diseñador, ver que todo esté bien y que se cumplan con los plazos pre establecidos y por último la imprenta, es realmente un trabajo de parto, pero como este generalmente tiene final feliz.
El primer libro de la trilogía, ilustrado nuevamente por Juan Moreno, se planea lanzar gracias al apoyo de la editorial “Lina” para mediados del mes de febrero.
Como todos los primerizos,este nuevo “bebe” trae en su mochila la expectativa y la incertidumbre de como tomará el publico a este nuevo proyecto. Por ahora los que lo han leído en privado han dado su conformidad, espero que el resto del publico opine lo mismo.

¿Cuento de terror o la nueva educación?


La escena se desarrolla en un comedor, en un lugar indeterminado del mundo occidental.
La madre sirve la sopa a su hijo de tres años que se encuentra jugando con un pequeño auto de juguete:
- Raúl deja de jugar y sentate a la mesa para comer.
El niño hace oidos sordos y sigue jugando con su auto.
- Raúl... ¿no me escuchaste?...veni a comer...
El niño sigue jugando sin hacer caso.
- Raúl...
- ¡No quiero comer sopa! Cométela vos si tanto te gusta-grita el niño arrojando el auto al plato de comida y enseñándole el dedo medio a su madre corre al patio.
La madre mira a su hijo correr y resignada piensa:
- ¡Que carácter tiene mi hijo!
Esta escena muy común en nuestros días no se daba en nuestra época de infancia en donde Raúl si no hacia caso a la primera llamada recibía un enérgico reto seguido de un seguro “correctivo”.
Es cierto que muchos padres se extralimitaban con sus “correctivos” entre los que se encontraban arrodillarse sobre granos de sal o maíz sin olvidar al famoso “don cinto”.
Es debido a las extra limitaciones que en los años 70´ aparecieron los psicólogos diciendo que los castigos afectaban la psiquis del infante y de ahí en mas la balanza se volteó para el otro lado. Hoy por hoy los niños son los que dominan el hogar, so pena de poder demandar a sus padres si estos se rebelan y no cumplen sus caprichos. Son los que otrora llamaban “mocosos” los que dictan las pautas y horarios del hogar... y nosotros, que recibíamos retos de nuestros padres por no cumplir las reglas, hoy recibimos retos y maltratos de los infantes transformándonos en la “generación sándwich”. Lo que antes era ser mal educado hoy, como lo ha hecho la madre de Raúl, es tomado como “carácter”.
El carácter es el sello que define a una persona pero de ahí a que sea el velo que cubra al descontrol infantil dista mucho.
No estoy de acuerdo con el maltrato infantil pero tampoco con el dejar a los niños como animalitos a su capricho y con poder legal para castigar a sus padres, he inclusive mandarlos presos. Particularmente no creo que un "coscorron" dado en el momento justo, más allá de marcar limites, haya traumatizado a alguien.
Para peor de males he leído la semana pasada que hay quienes que dicen que los únicos que tienen el derecho de “educar” son los maestros ya que los padres solo tienden a “adoctrinar” a sus hijos. Con este pensamiento las tradiciones familiares se disolverán, perdiéndose finalmente, para ser reemplazadas por las  de un frio sistema que impartirá la “educación” del gobernante de turno.
Si estas condiciones se dan, es evidente que esta nueva generación se las tendrá que ver con la próxima en donde no quiero imaginarme que puede llegar a pasar... El solo pensarlo es escalofriante... prefiero alquilarme alguna película de terror. ¿No lo creen así?

domingo, 9 de enero de 2011

Areguá


Los que vivimos en la jungla de cemento asuncena sabemos muy bien como esta puede transformarse en un verdadero microondas en los meses del tórrido verano paraguayo. Cada vez con mayor intensidad, el sol, cae a pleno sobre las sinuosas calles llegando hasta casi derretir la capa asfáltica. Esto se debe, en parte, a la perdida del “escudo” verde que proporcionaban los arboles que poco a poco fueron desapareciendo de las veredas y casas debido las iracundas tormentas tropicales y a la inconsciencia de los “árbolfobos” que no quieren que su patio se llene de hojas o que las raíces levanten sus veredas. ¿Vale la pena asesinar a un árbol centenario para construir en su lugar una residencia, un shoping o un estacionamiento?
Es cierto que Asunción es una ciudad con muchos árboles , pero no hay punto de comparación con los que había hace veinte años atrás.
Es por todo esto que cuando me propusieron asistir a un cumpleaños en la ciudad de Areguá no dude utilizar la oportunidad para refrescar mis ojos con la “espuma vegetal” de la frondosa capital del departamento central. 
Ubicada a 29 kilómetros de Asunción , a orillas del otrora lago “azul de Ipacaraí”, Areguá, recibe su nombre del de sus primitivos pobladores, los Mbya Guaraní, indígenas que habitaban esa zona antes de la colonización española. A este grupo se los llamaba “Ariguá”, “los de arriba”, debido a que vivian en una región relativamente alta. En esta ciudad, donde los franciscanos llegaron a partir del siglo XVI, compiten las antiguas casonas coloniales de techos de tejas y amplios corredores con el majestuoso paisaje, donde el vibrante verde se funde con el rojo de la tierra y el azul del cielo que se refleja en el espejo del lago. Una ciudad a la que la alfarería y las frutillas dan color y sabor y donde sus habitantes disfrutan de un reparador descanso en sus frescas viviendas de altos techos de teja.
Sin pretender que este texto sea comparado con un folletín turístico, quiero agregar que en Areguá se respira tranquilidad y, en especial, un aire privilegiado y vedado para muchas ciudades incluyendo Asunción.
Es cierto que un lugar como este es una verdadera burbuja del tiempo en un mundo cada vez más poblado, en donde los rascacielos compiten unos con otros, tal vez como lo hizo Dédalo, para alcanzar al sol... y sabemos muy bien el precio que tuvo que pagar el mítico hijo de Ícaro. 



sábado, 8 de enero de 2011

Vocación

Cuantos dejan de hacer lo que realmente desean simplemente por llevarse por los consejos o presiones de las personas, generalmente, “muy allegadas”. Es probable que una persona siga la carrera de médico simplemente porque su padre y abuelo lo fueron.
Dejate de la estupidez de la poesía, tenes que ser abogado, esos si que ganan plata, podría ser el consejo que puede transformar a un entusiasta y creativo joven en un viejo frustrado... pero rico.
Estoy seguro que el lector de estas lineas estuvo alguna vez en lo que se podría llamar “la bifurcación del camino” y ha tenido que decidir si seguir a su pasión o a la practicidad.
Cada persona, al igual que una maquina, ha sido creada para un fin determinado(vocación). Es por ello que cuando el entorno del sujeto en cuestión obliga, presiona, chantajea emocionalmente,entre otras cosas, a hacer algo que este no desea(practicidad), al elegir el camino señalado, terminará por frustrarse y estresarse para finalmente marchitarse en su escondida amargura. Es como si con una maquina destinada a la fabricación de monopatines queramos fabricar autos. Es probable que se pueda modificar la maquinaria y hacerla funcionar, pero los autos fabricados seguro que no tendrán la misma calidad que la obtenida al fabricar monopatines.
Los que hemos optado por el camino que nos indica nuestro corazón y no el entorno, nos ha costado caro... pero a la larga, y estoy convencido de ello, ese precio habrá valido la pena, pues lo que hacemos lo hacemos con el corazón.
Hace un poco más de un año y medio me encontraba en esta disyuntiva y fue cuando se me acercó un amigo y me dijo:
No permitas que te aparten de la escritura ya que si lo hacen será como si te cortaran las ... manos. En realidad dijo otra cosa en vez de "manos", pero... como por este blog pasan muchas damas...
Los que hemos nacido con el germen de la escritura no podemos ser alejados mucho tiempo de este camino y, como una surgente de agua, haremos lo imposible por encontrar un río en donde desembocar.
Todos necesitamos de una válvula de escape que libere las presiones que el día a día ejerce sobre nosotros y esa válvula sólo se encuentra al ejercer nuestra vocación.
El escritor,quien no esta ajeno a esto, utiliza a la escritura como esa válvula que permite divagar y crear, por lo menos en sus escritos, el mundo utópico que desea. Si se cierra esa válvula, dejando de escribir y dedicándose a lo que le imponga el entorno, creará el mismo efecto que el cerrar la salida de una olla a presión.
No permitamos que nos corten las manos y nos impongan lo que debemos hacer ya que las penurias y necesidades que podamos pasar al seguir el camino del corazón serán mínimas si las comparamos con la frustración de dejar de ser lo que realmente somos.  

domingo, 2 de enero de 2011

Que lo de feliz año no quede en el deseo




Y la rueda esta volviendo a girar. El 2010 se fue con sus luces y sombras, con sus desilusiones
producidas por violencia e inseguridad urbana, arrogancia,injusticia, pero también con su carga de humanidad donde se ha demostrado que la unión de las personas puede lograr lo imposible, como lo demuestran los terremotos de Haití y Chile o el rescate de los mineros de este mismo país trasandino.
Cada uno de nosotros, como es costumbre, ha hecho un balance de cosas buenas y malas en relación a este año que se fue como también a puesto “todas sus fichas de esperanza” apostando al nuevo año.
La esperanza es el motor que nos impulsa para poder cumplir nuestra misión en la tierra. Sin esperanza seriamos simples autómatas, sumergidos en la inmundicia de la corrupción,chantaje,injusticia...
Sin embargo no podemos dejar libre al timón de nuestra nave y que el viento de la “esperanza” nos lleve a buen puerto. Si el 2010 no ha sido lo que queríamos, somos nosotros desde nuestras posibilidades los que debemos cambiar y hacer que cambie nuestro entorno en el año que se inicia, con esperanza pero también con determinación en ir hacia donde queremos.
Por lo general todos hablan de como la fruta podrida “contagia” a las que se encuentran al lado suyo y finalmente todas terminan por destruir al cajón donde están contenidas, pero pocos recuerdan que un océano está formado por millones de millones de gotas. Seamos cada uno de nosotros la gota de luz que de origen a un gran océano de comprensión, armonía, de garantía de legalidad, libertad de profesar la propia fe, de derechos y deberes iguales para todos, respeto, justicia, salud, casa, escuela, trabajo, dignidad de las personas, un océano que desplace con su fuerza al de la corrupción, etnocentrismo, amiguismo.
Como se dice por ahí, año nuevo... borrón y cuenta nueva. De nosotros depende que el 2011 sea el comienzo del origen de ese oceano en el que el deseo de un feliz año no sea sólo un deseo el 31 de diciembre próximo, una utopia, sino una realialiad.
Feliz comienzo de 2011 para todos...y manos a la obra.