Hoy llueve. Las frías gotas golpean los cristales de la ventana y resbalan hasta el piso del balcón para finalmente caer a la calle.
Siempre me gustaron los días de lluvia, al igual que la noche, para escribir. Quién sabe, tal vez las musas o los duendes de la escritura bajan del cielo en las gotas para contarme al oído las aventuras de viajes que han realizado a lo largo del mundo mientras la “nave” que los trajo a mí solamente era una pequeña nube de vapor.
Puede decirse que soy un soñador, alguien que huyendo del bullicio del día a día viaja a un mundo de aventuras y sueños, para volver con ellos, crear y volcar el resultado en las hojas de sus libros para que en un futuro incierto, lectores de todo el mundo los tomen como suyos y puedan seguir construyendo “sus sueños”.
¿Será que nuestros sueños no son sólo tales sino etéreos hilos de luz que nos guían hacia el camino donde debemos ir?
Dijo mi ciberamiga Marisa “Así como le ocurrió a Don Quijote, el hombre muere cuando deja de soñar.” Es cierto que no podemos vivir eternamente en la irrealidad, como el personaje de Cervantes, pero tampoco podemos prescindir de nuestros sueños gracias a los cuales el mundo debe, de una u otra forma, el avance tecnológico que hoy tenemos. Solamente debemos tener un cable a tierra con el cual comparar la fría y mundana realidad con nuestro mundo soñado.
No debemos bajarnos o soltar a nuestros sueños, debemos aferrarnos a ellos aunque todo conspire contra nosotros ya que no sabemos donde estos nos puedan llevar.
Sin sueños no somos más que un pedazo de carne ciega que vaga sin rumbo durante toda la vida.
Sin sueños no somos más que un pedazo de carne ciega que vaga sin rumbo durante toda la vida.
- Y para terminar quiero dejarles la frase de un gran soñador:
“De los diversos instrumentos inventados por el hombre, el más asombroso es el libro; todos los demás son extensiones de su cuerpo… Sólo el libro es una extensión de la imaginación y la memoria”.
Jorge luis borjes
Amigo, Alejandro:
ResponderBorrarMe ha encantado esta entrada en la que tus letras fluyen desde el mundo de los sueños, y es que tienes razón, no podemos vivir sin soñar, porque gracias a los sueños, hacemos que nuestras ilusiones permanezcan con luz y esperanza, porque la vida sin sueños sería como una sombra que agoniza.
Incluso puede ser que las simples gotas de lluvia nos puedan propiciar a soñar más, o ese paisaje que observamos mientras la lluvia cae...
Y aunque no podemos vivir siempre en un mundo soñado, sí alguna vez, está bien perderse en esos sueños.
Mi felicitación por tu manera de transmitir y mi admiración.
Un beso.
Gracias ciberamiga!!! El tema es que aveces estoy más en mi mundo que en el real, resultando esto en ocho libros, que espero sirvan a otros para continuar sus sueños.
ResponderBorrarUn ciberabrazxo de luz.
"¿Qué es la vida? Un frenesí.
ResponderBorrar¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño:
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son."
Caderón de la Barca, "La vida es sueño"
Querido Alejandro:
Me declaro completamente anticalderoniana a pesar de la belleza de esos versos dramáticos. Me gusta seguir y sentir las sendas quijotescas llenas de surcos y ficción. La vida es eso mismo: la ficción que cada uno de nosotros consigue crear. Si mueren los sueños, la vida será un vasto cementerio de cadáveres vivos.
Gracias por ese enlace.
Un fuerte abrazo, mi admirado amigo.
Hola Alejandro !
ResponderBorrarmuy buen articulo mi querido escritor! Me ha gustado mucho,
y quisiera añadir que sin sueños y sin Amor no se llega a ninguna parte. Que ademas de los libros, tambien está el dibujo y la pintura que tambien cuentan su historia llena de magia y de cosas nuevas por descubrir ... Y que sin lugar a dudas es un don y un privilegio el poder hacer todo esto, es algo que le da sentido a la vida, y que nos hace sentir especiales tambien.
Un gran abrazo de luz !