Cuentos en el blog

viernes, 30 de diciembre de 2011

2012; demos la bienvenida al FIN DEL MUNDO

Nuevamente nuestro planeta esta culminando otra vuelta más de su incansable viaje alrededor del sol. En este recorrido trescientas sesenta y cinco veces hemos vivido nuestro día, algunos de forma intensa, construyendo, creando, viviendo, otros simplemente dejándose llevar por la corriente y dilatando sus decisiones para mañana.
Independientemente de la actitud con la que hemos enfrentado el 2011, todos hemos sido testigos, en forma personal o virtual, de un año terriblemente convulsionado en todo el sentido de la palabra. Terremotos, tsunamis, agitaciones violentas de agrupaciones políticas y sociales que pusieron fin a largos años de gobiernos, seguidos de vandalismo al patrimonio de la humanidad por parte de las turbas enardecidas.
También hemos sido testigos, entre varios acontecimientos de trascendencia mundial, de las festividades del bicentenario de varios países de América y, con ellas, el despertar del interés por conocer un poco más allá de la historia que se nos obligo a estudiar en la escuela, valorizando y redescubriendo nuestros deslucidos edificios perdidos en la indiferencia del urbanismo moderno y del transeúnte.
Nadie puede negar que 2011 fue un año intenso y que con sus luces y sombras ha construido un peldaño más en el que se sustentará al ya famoso 2012, año del fin del mundo según las interpretaciones que algunos hacen a las predicciones de los Mayas.
Si me preguntan, es probable que en 2012 a muchos les llegue “su fin del mundo” como a muchos ya les llegó “su fin” en 2011 y en cada año desde que el primer ser habito este planeta.
Del mismo modo que hace once años se nos decía que el fin llegaría cuando las manecillas del reloj marcaran el primer segundo del año 2000, el científico Max Wolf anunció a principios del siglo XX: «A las 4.25 del 20 de mayo de 1910, la tierra atravesará la cola del Cometa Halley»…El Halley paso… y la tierra sigue girando.
Es cierto que fenómenos estelares afectaron en parte la vida sobre este planeta como por ejemplo: el cometa que fue capturado por la atracción orbital de la tierra el 30 de junio de 1908 golpeando con fuerza a la tierra y causando la muerte en la zona de Tunguska, Liberia; o el famoso meteorito o cometa que terminó con los dinosaurios; sin embargo, a pesar de la muerte y destrucción causada, el planeta con algunas pequeñas variaciones sobre su eje de rotación, sigue girando y la vida sigue existiendo sobre él.
Puede que me equivoque y que, como el famoso cuento de aquel pastorcillo que alertaba falsamente a los vecinos del ataque del lobo sobre las ovejas del rebaño y que cuando ocurrió nadie le creyó, el 21 de diciembre de 2012 este planeta se convierta en un cinturón de estériles asteroides y nosotros, según algunos, comiendo en la mesa del Creador, según otros, buscando algún lugar para continuar con la misión encomendada que ha quedado inconclusa.
Si el fin de la existencia de vida sobre el planeta tierra fuera una realidad, y nos quedara menos de un año, no debemos desesperar y tirar todo por la ventana, al contrario, estamos ante la última oportunidad de dejar de ser egoístas; viciosos; acomplejados; sucios tanto mental como físicamente; ignorantes de los derechos de los demás, pisoteando todo lo que se encuentra a nuestro alrededor sin importar que o quien se encuentra a nuestro lado o dejar de abandonarnos en los brazos de los intereses de grupos religiosos, políticos y económicos cuyo único deseo es arrear para su molino y decir “tantos somos, tanto valemos”.
Durante este año, tanto en Paraguay como en Uruguay, fui testigo de las festividades del Bicentenario y el efecto de cambio, en cuanto a la revalorización de la historia y de las reliquias todavía existentes, que este acontecimiento causo sobre los habitantes de estos países.
Del mismo modo, aprovechemos estos “últimos días” para redescubrir el “SER” que llevamos adentro nuestro y proyectarlo hacia los demás.
Reeduquémonos, recobremos los valores, la solidaridad, la amistad desinteresada, la honorabilidad, la palabra, el respeto por el espacio y los logros del prójimo, el amor, e inculquémoslos con el ejemplo a quienes nos rodean. Demos todo de nosotros con el único objetivo de lograr que el hombre deje de ser su peor enemigo.
¿Qué es una utopía? Tal vez querer cambiar al mundo lo sea, pero no lo es el intentar este cambio en nosotros mismos e irnos de este espacio celeste satisfechos de haberlo logrado.
Apartémonos del egoísmo y de la ambición desmedida; derribemos las fronteras y con ellas las actitudes etnocentristas; demostrémonos a nosotros mismos que no es tan malo hacer lo correcto.
Quién sabe, tal vez los Mayas en sus predicciones se referían al “FIN” de este caótico, egoísta, despreocupado y convulsionado mundo y con su destrucción el surgimiento de la verdadera “HUMANIDAD”.
Levantemos nuestras copas y demos la bienvenida al 1012, el año del FIN DEL MUNDO...año de la OPORTUNIDAD DE SER MEJORES.



4 comentarios:

  1. Alcemos nuestras copas y brindemos por un nuevo año 2012 y que sigas compartiendo el arte de tus letras, amigo mío.

    Te deseo un feliz año 2012 y que todos tus proyectos se vean cumplidos.

    Un beso.

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  2. Un super abrazo de luz para vos y tu familia ciberamiga, que este año te traiga todo lo que te falto este año multiplicado por tres.

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  3. Un brindis por el nuevo año, que tus letras sigan inspirando corazones.

    Besos

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  4. Muy buen texto. ¡Feliz año nuevo! Saludos cordiales.

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